El festival de cine de Karlovy Vary comenzó el viernes su 51 edición con un reconocimiento al actor estadounidense Willem Dafoe y el estreno mundial del drama histórico “Anthropoid”, dedicado a las víctimas de la tiranía nazi.
Sean Ellis, su director británico, que acudió al certamen acompañado por todo el equipo artístico del filme, agradeció antes de la proyección el apoyo del Estado para rodar en suelo checo.
“Ha sido trabajoso traerlo hasta su país natal”, dijo Ellis, que empezó este trabajo hace 15 años y ha querido dedicarlo “a los hombres y mujeres de la ex Checoslovaquia, que sufrieron la tiranía”.
“Es mi tributo a ellos”, añadió sobre este relato que trata del atentado contra Reinhard Heydrich, uno de los hombres más poderosos del III Reich, que desencadenó duras represalias sobre el pueblo checo durante la Segunda Guerra Mundial.
“Nos damos cuenta de la importancia de la historia para Checoslovaquia, y quisimos contar esta historia de manera adecuada”, dijo el actor irlandés Jamie Dornan, protagonista de la cinta.
Previamente, el Gran Hall del Hotel Thermal honró con sus ovaciones al actor Willen Dafoe, que emocionado recogió el Globo de Cristal por su contribución a la cinematografía mundial de manos del presidente del certamen, Jiri Bartoska.
El actor destacó que se siente “muy orgulloso” de que su contribución al cine sea “tan valorada”.
Dafoe acudió al balneario checo en compañía de su mujer, la italiana Giada Colagrande, con la que posó y se dio un baño de multitudes por la alfombra roja delante del Thermal, en una tarde soleada y agradable.
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