Si hay un rey en los cambios de look, ése es Ricky Martín. Cada vez que comienza una gira o varía su estilo musical, el boricua deja con la boca abierta a todo el público, esta vez se ha rapado, se ha teñido y se ha puesto gafas.
Muchos han sido los cambios con los que el cantante ha sorprendido durante su carrera, pero muchos afirman que el presente look es uno de los más arriesgados.
El cambio viene de la mano del inicio de la nueva gira de promoción de su disco MAS: Música + Alma + Sexo. El puertorriqueño, de 39 años, ha integrado a su imagen tres ingredientes: ha rapado por completo sus dos lados de la cabeza, ha teñido el restante con mechas rubias y se ha puesto gafas de pasta negra.
Así se lo pudo ver ayer durante la presentación de su álbum en México, donde además de promocionarse y firmar autógrafos, el joven compositor mostró su lado más sentimental besando a una niña enferma que acudió al evento. La pequeña se llama Bjork, y tiene todo su cuerpo marcado por las quemaduras de un incendio.
Las fanáticas mexicanas de Ricky Martin aguardaron desde la madrugada para ver a su ídolo.
Pero otro gran sector que estuvo presente para brindarle todo su apoyo al cantante boricua fue la comunidad homosexual, que entre gritos de histeria y amor expresó frases de halago para el cantautor.
La compañía discográfica que hizo posible la firma de autógrafos para promocionar el último álbum de Ricky destacó que la rúbrica del artista sería sólo para 600 personas que compraran su material discográfico en una conocida disquería, pero el llamado para las fanáticas rebasó las expectativas al congregarse más de 2.000 personas.
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