Tom Cruise, la marioneta de la Cienciología, afirmó ayer en la alfombra roja de su película «Jack Reacher», que «es una religión bellísima». Una periodista de la televisión italiana dejó caer su pregunta al hilo del estreno del documental «My Scientology Movie» del cineasta Louis Theroux.
Cruise se deshizo de su incomodidad apresuradamente. «Es algo que me ha ayudado increíblemente en mi vida. He sido miembro de la cienciología más de treinta años. Sin ellos, no estaría aquí. Es una religión bellísima, me siento increíblemente orgulloso».
La primera vez que Cruise acudió a un centro de la cienciología fue junto a su primera mujer, la actriz Mimí Rogers, en 1986. Desde entonces, es fiel participante de su congregación y ha sumado su voz contra las voces que retratan a este culto de una forma negativa, aunque se ha mostrado reticente a hablar de ello en entrevistas, como explicó en «PlayBoy», en el 2012. «No hablo de mi religión, como tampoco discuto mi trabajo humanitario».
Fue ese año, tras su devastador divorcio de Katie Holmes, cuando Tom Cruise escapó de Hollywood y se trasladó a vivir a Londres, a las afueras, dedicándose por entero a trabajar, sin tiempo de descanso entre una película y otra, consumido en su profesión. Su único consuelo. En estos casi cuatro años alejado, los medios cuestionaron su relación con su hija Suri, de 10 años, a quien, al parecer, volvió a ver este verano por primera vez tras la separación.
El icono de «Misión Imposible» es, a sus 54 años, una de las grandes estrellas del cine y, tras tres sonados divorcios (Mimí Rogers, Nicole Kidmany Katie Holmes) no ha vuelto enamorarse. Al menos hasta ahora, ya que la revista «US weekly» asegura que Tom ha encontrado de nuevo el amor de la mano de una mujer inglesa que no tiene nada que ver con la industria de Hollywood.
La relación comenzó el pasado mes de junio, durante el rodaje de la película «The Mummy».
A Cruise le llamó la atención esta mujer y la invitó a pasar con él un fin de semana romántico en los Costwolds británicos, concretamente en Bourton-on-the-Water. «Han estado juntos desde entonces» afirman los amigos cercanos a la pareja. «Ella es muy normal, bonita, y pasa mucho tiempo con él en la casa que Tom ha alquilado a las afueras de Londres», explican en las páginas de la revista. Cuesta creer que el pupilo de la cienciología elija otra mujer fuera de los límites de su religión, a tenor de los devastadores efectos que la separación, de Kidman primero y Holmes después, tuvo para él, precisamente por la negativa de ambas a participar de su religión.
Cruise vuelve a enamorarse después de cuatro años solo y cuenta con el apoyo de su familia. «Se ha tomado en serio esta relación y quiere que funcione» dicen sus allegados en «US Weekly». Sin duda el padre de tres hijos; Suri, Bella, 23, y Connor, 21, necesita una compañera en su vida.
Por su parte, Katie Holmes mantiene una relación más secreta junto al actor Jamie Foxx. Los dos, a quienes jamás se ha visto en público, viven a corta distancia uno del otro y mantienen un romance secreto desde hace tres años.
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