La actriz Amanda Bynes fue hospitalizada para recibir una evaluación psiquiátrica tras supuestamente desatar un pequeño incendio en la entrada de una casa en el sur de California, informaron las autoridades. Los policías que respondieron a una llamada el lunes por la noche encontraron a Bynes, de 27 años, de pie junto a las llamas en la ciudad de Thousand Oaks, según el capitán Don Aguilar.
Las autoridades determinaron que era necesario mantenerla supervisada y la detuvieron. Podría estar bajo observación por 72 horas. No se formularon cargos en su contra, dijo Aguilar. Los abogados de Bynes, Richard Hutton y David Feldman rechazaron hacer comentarios el martes. La exactriz del canal Nickelodeon ha tenido varios roces con la ley en California. En diciembre, la estrella de “Hairspray” resolvió un caso, por medio de un acuerdo civil con otros conductores, en el que estaba acusada de darse a la fuga tras un accidente vial. A finales del año pasado fue acusada de conducir con una licencia vencida después de que el documento le fuera retirado por dos accidentes de tránsito en los que también fue acusada de intentar darse a la fuga sin proporcionar la información adecuada. Se ha declarado inocente por conducir en estado de ebriedad en otro caso independiente.
Este mes Bynes se presentó en una corte de Nueva York acusada de haber lanzado una pipa de agua para fumar marihuana desde la ventana de su apartamento en un edificio de Manhattan. Bynes fue una de las actrices más populares de la televisión infantil en las décadas de 1990 y 2000.
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