Beyoncé sigue en el paredón

Aún se desconoce si la cantante cantó en vivo o sobre una pista.

La estrella del pop estadounidense Beyoncé Knowles se encuentra actualmente en el centro de una especie de tormenta de medios de comunicación y redes sociales, por la intervención que tuvo en la toma de posesión del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
El motivo de la controversia se debe a que se vendió a Beyoncé como la figura de cartel principal en el evento, por eso es que resultó comprensible que más de uno resultara desilusionado cuando el periódico The New York Times publicara que la estrella no había cantado en vivo el himno nacional, sino que había doblado (o “sincronizó los labios” con una pista grabada, como pudiera traducirse la expresión en inglés lip synching). Lo cual fue catalogado como un “fraude”.
Otros casos. Mientras se investiga para saber a ciencia cierta si la cantante hizo o no trampa, bbcmundo.com, hizo un repaso por otros artistas que se vieron en una situación similar.
De Michael Jackson a Britney Spears, de Madonna a la niña que cautivó al mundo en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín, es larga la lista de artistas que fueron puestos en el paredón de los críticos por no demostrar, en vivo y directo, que sus cualidades vocales trascienden la mesa de mezclas que los hace sonar tan bien en sus discos.
Beyoncé, por su parte, tuvo y tiene miles de oportunidades de demostrar que sí canta, pero su intervención en la jornada del lunes 21 de enero la mantiene bajo el foco de los reflectores de la opinión pública y seguidores.
Los medios recogen los “informes contradictorios” que surgieron sobre el caso, pero lo cierto es que la artista aún no se pronunció al respecto y que según un miembro de la banda que la acompañó, ella habría optado por usar un track pregrabado.

“Nadie en la banda está en posición de determinar si (la participación de Beyonce) fue en vivo o pregrabada”.

Declaración de la Banda de los Marines de EEUU

Medida de precaución. El informe que dio bbcmundo.com, indica que “la señora Knowles-Carter no tuvo tiempo de ensayar antes de la inauguración, así que se determinó que un espectáculo en vivo no era una buena idea en un evento de tan alto perfil”.
Entonces, como medida de precaución frente a la posibilidad de que el viento, una falla técnica u otras posibilidades de dañar el show, todas las piezas del evento fueron grabadas.