Sin importar cualquier gusto musical o los géneros que se prefieran, todo el mundo está expuesto al poderío mediático de la cultura pop. Es imposible mantenerse aislado de sus íconos y figuras actuales. ¿Quién no ha escuchado hablar, por lo menos una vez, de Lady Gaga, Katy Perry, Miley Cyrus o One Direction?
En el mismo sentido, es imposible no voltear, aunque sea por morbo, cuando se ve el siguiente desfiguro, descalabro o resbalón de alguno de sus protagonistas. En especial aquellos que en algún momento fueron tiernos ídolos infantiles y que parecían no matar ni a una mosca. ¿Qué pasa por la mente de las niñas Disney cuando dejan de serlo?. Es todo un misterio. /GQ
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