La pareja formada por Emma Stone y Andrew Garfield estaría atravesando algo más que una crisis pasajera en su relación de más de tres años, ya que la actriz ha decidido mudarse a Los Ángeles para cortar "definitivamente" cualquier vínculo con el que había sido su novio hasta principios de este mes.
"Emma fue la que terminó la relación y después se mudó de nuevo a Los Ángeles. Han terminado definitivamente. No es simplemente una separación", reveló una fuente cercana a Emma a la revista Us Weekly.
Una de las razones que podría haber causado la ruptura entre los dos intérpretes es la dedicación de Andrew al personaje al que da vida en la nueva película de Martin Scorsese, 'Silence' -donde interpreta a un jesuita del siglo XVII-, para el que ha perdido 18 kilos y se ha mudado a Taiwán, donde comenzó el rodaje el pasado mes de enero.
"[Andrew] ha estado en un lugar oscuro durante meses, metiéndose en el papel. No ha sido el mejor novio", confesó otro informante al mismo medio.
Aunque Emma sería capaz de entender las "ansiedades profesionales" que sufre Andrew, ya se conocía que la dedicación de cada uno de los actores a sus respectivas carreras profesionales suponía un gran problema para su relación.
"Emma entiende sus ansiedades profesionales, es por lo que ella rechazó hacer 'Cabaret' el año pasado y solo lo hizo este año. Pero ambos se están dando un tiempo. Los dos son esclavos de sus horarios. El año pasado por estas fechas, estaban hablando en privado de matrimonio", añadía una fuente a la revista People.
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