Martín Coscia es un empresario argentino que quedó fascinado con Carla desde que la vio.

La primera vez que se vieron fue en Buenos Aires, hace ya más de un año. Carla Ortiz trabajaba en la preproducción de la película Olvidados y él se acercó a saludarla en un restaurante. Martín Coscia es un empresario argentino que quedó fascinado con Carla desde que la vio. No se imaginaba que era actriz, ni boliviana, simplemente se sintió atraído por su belleza y su aura. Desde el primer encuentro le declaró su amor y le dijo que sería su novia.

Carla dice que al principio lo sintió muy lanzado, pero su persistencia hizo que se dieran las cosas. “Yo salía de una relación de casi cinco años, después de la que me dediqué a mi proyecto y a mi carrera. Volver a empezar fue complicado. Me encantó conocer a un chico con esa constancia y determinación. Me decía: yo no tengo la culpa de que tú no sepas lo que quieres, yo sé lo que quiero. Me llamaba 25 veces y 19 le decía que estaba ocupada; no se enojaba y me volvía a llamar, nadie te aguanta eso”

No hay un día exacto para decir que se inició la relación, asegura la pareja. El estilo de vida ajetreado de ambos les hizo formar algo especial. Conectados por teléfono o por skype, el vínculo entre ambos crece. Martín vino a la premier de Olvidados en Santa Cruz y conoció a la familia de Carla en Cochabamba, quedó fascinado con Bolivia.