Aunque fue capaz de reducir drásticamente sus medidas semanas después de dar a luz a su hija North, Kim Kardashian no está del todo satisfecha con el hecho de haber devuelto su cuerpo al estado previo a su mediático embarazo, ya que su objetivo final va mucho más allá: retrasar el reloj cinco años y volver a lucir la esbelta figura que tenía entonces, cuando pesaba 10 kilos menos que en la actualidad.
Así lo ha confesado la propia estrella en su perfil de Instagram al publicar una fotografía del año 2009, en la que con 28 años de edad lucía orgullosa un ajustado vestido conjuntado con unos altísimos tacones.
"Ughhh ¡Aquí peso 10 kilos menos y hace solamente cinco años de esta foto! Vale, voy a volver al trabajo duro. ¡Tengo que volver a estar así! (sic)", escribió Kim para describir sus sensaciones ante una fotografía que le traía gratos recuerdos.
La estrella de la telerrealidad, quien nunca ha tenido problemas a la hora de compartir públicamente las muchas y variadas dietas que ha seguido a lo largo de su vida, aseguró hace unas semanas que había descubierto los beneficios de las fresas como alimento adelgazante y que se había aventurado a llevar un régimen basado en la ingesta de esta fruta, así como de otros productos que cuenten con ella como principal ingrediente.
"Solamente lo hace algunos días a la semana. Desayuna y come fresas y entre horas toma batido de fresa", aseguraba una fuente al periódico The Sun.
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